La Pinacoteca de São Paulo, institución de la Secretaría de Estado de Cultura, presenta la exposición Lucy Citti Ferreira, con alrededor de 60 obras realizadas entre 1930 y 1990. Las obras forman parte de un conjunto de pinturas, dibujos, grabados, fotografías, recortes de periódicos, manuscritos, correspondencia y documentos personales, catálogos e invitaciones a exposiciones, que fueron donados por Lucy (São Paulo, SP, 1911 – París, Francia, 2008) a la Associação Pinacoteca Arte e Cultura-APAC, pocos meses antes de su muerte . La donación fue recibida por Regina Teixeira de Barros, curadora de la Pinacoteca quien, junto a Rosa Esteves, investigadora del Museo Lasar Segall y amiga del artista, se encargaron de organizar y catalogar todo el contenido recibido. “Se estimó, a primera vista, que había unas 600 obras en papel para catalogar (…). Sin embargo, después de casi tres años, el número era más de cinco veces mayor: se catalogaron 3219 obras de Lucy”, dice Regina Teixeira de Barros.
Esta exposición es la más completa jamás realizada sobre su obra. Es una rara oportunidad de ver a un grupo significativo de la artista reunida en un solo espacio, pues su última exposición individual tuvo lugar en 1988 en el Museo Lasar Segall, cuando también donó cinco obras, un dibujo y cuatro xilografías a la Pinacoteca. La exposición de Lucy Citti Ferreira comienza con pinturas realizadas durante la formación de la artista en París y finaliza con un conjunto de paisajes imaginarios realizados en acuarela en la década de 1980. Entre los dos extremos están los dibujos, acuarelas y pinturas que Lucy realizó entre 1935 y finales de la década de 1950, el período más productivo de su carrera. Se contemplan retratos, bodegones, grupos de figuras, escenas de interior y, en mayor medida, autorretratos, que destacan tanto por la calidad de la pintura como por la cantidad de variaciones sobre el tema. A través de esta selección de obras, también es posible seguir las sutilezas de las transformaciones formales que aparecen en este intervalo: desde la alineación con las características de la Vuelta al Orden hasta las simplificaciones de la figura ligeramente contaminadas por las tendencias abstraccionistas de la posguerra.
“La exposición pretende resaltar la calidad de la obra de Lucy y reparar, en la medida de lo posible, el borrado al que quedó relegada. Al mismo tiempo, la ocasión es propicia para hacer explícita su singularidad, que muchas veces ha sido cuestionada por el parecido (superficial) de algunas obras con las de Lasar Segall, de quien fue modelo y discípula. Finalmente, esta muestra pretende cumplir con un compromiso adquirido muchos años antes, de acoger su obra, estudiarla y difundirla con la distinción que merece, a fin de insertarla efectivamente en la historia del arte brasileño”. Dice Regina Teixeira de Barros, curadora de la muestra.
sobre el artista
Lucy Citti Ferreira (São Paulo SP 1911 – París, Francia 2008). Pintor, diseñador, grabador, docente. Vive su infancia y adolescencia en Italia y Francia con su familia. En 1930, asistió a un curso vespertino de dibujo de modelos clásicos en la École Régionale des Beaux-Arts de Havre. Inició sus estudios de pintura con André Chapuy. De 1932 a 1934 asistió a la École Nationale des Beaux-Arts [Escuela Nacional de Bellas Artes] de París. Estudió pintura con Fernand Sabatté (1874-1940) y escultura con Armand Matial (1984-1960). Expone en el Grand Palais y el Salon des Tuileries. Vuelve a Brasil e instala su estudio en la Rua Martinico Prado, en el barrio de Higienopólis, en São Paulo. Conoció al pintor Lasar Segall (1891-1957), de quien se convirtió en alumna y modelo. Vuelve a vivir a París en 1947 y, al año siguiente, expone en la Galerie Jeanne Bucher, de París. En 1954 realizó una exposición individual en el Museo de Arte de São Paulo. En 1988 realizó la exposición individual Sombras y Luces en el Museo Lasar Segall. En esa ocasión, donó cinco obras (un dibujo y cuatro xilografías) a la Pinacoteca do Estado de São Paulo y siete obras (seis pinturas y un dibujo) al Museo de Arte Moderno de São Paulo. En 2000, participó de la muestra Mostra do redescubrimiento: Negro en cuerpo y alma, organizada por la Fundação Bienal de São Paulo. En 2004, participó de la exposición Mujeres pintoras, en la Pinacoteca do Estado, São Paulo, y de la exposición La Mirada Modernista de JK, en el Ministerio de Relaciones Exteriores, Palacio de Itamaraty, Brasilia, Distrito Federal. Murió el 17 de noviembre de 2008 en París y sus cenizas fueron trasladadas a la tumba familiar en el cementerio de Consolação, en São Paulo.